Otra voz silenciada

Otra voz silenciada

: el hallazgo sin vida de la Exlocutora Giovanna Ramírez reaviva la crisis de violencia contra periodistas en México

La noche del domingo 10 de agosto, la exlocutora y comerciante Giovanna Ramírez fue localizada sin vida sobre la banqueta de la calle Queta Jiménez, en la colonia Estrella de Silao, Guanajuato, muy cerca de la carretera a Trejo y de las instalaciones de la Feria. Aunque las autoridades municipales aseguraron que el cuerpo no presentaba huellas de violencia y que vecinos no escucharon riñas ni detonaciones, la noticia encendió de nuevo las alarmas sobre la inseguridad que enfrentan comunicadores y periodistas en México.

Giovanna, quien en el pasado trabajó como locutora en Exa y La Mejor Monterrey, así como en Azteca Noreste, actualmente era propietaria del bar Las Cinco Coronelas en Silao. Según versiones extraoficiales, en el lugar había botellas que hacen presumir que no estaba sola, será la Fiscalía General del Estado la que determine la causa de su muerte tras la necropsia de ley.

Este caso se suma a una estadística que preocupa y duele: en lo que va de la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, siete periodistas han sido asesinados; con Giovanna Ramírez, la cifra pudiera aumentar a ocho. Aún más alarmante es que dos de estas víctimas ejercían su labor en Guanajuato: Kristian Uriel Martínez Zavala, también asesinado en Silao; Raúl Irán Villarreal Belmont, de San Luis de la Paz; y ahora Giovanna.

En el ámbito local, bajo la administración municipal de Melanie Murillo, este es ya el segundo comunicador asesinado en Silao en menos de un periodo de gobierno.

De acuerdo con Artículo 19, desde el año 2000 a la fecha sin contar el caso de Giovanna, en México han sido asesinados 174 comunicadores. El país sigue figurando como uno de los más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo, donde informar puede costar la vida y donde la impunidad es el común denominador.

El hallazgo de Giovanna Ramírez, más allá de las causas precisas de su muerte, vuelve a colocar bajo la lupa el contexto hostil en el que trabajan periodistas y comunicadores. En Guanajuato, el ejercicio de la libertad de expresión no solo se enfrenta a amenazas directas, sino también a un clima de inseguridad generalizada que no distingue entre un reportero activo o un excomunicador.

Mientras las autoridades investigan, en la comunidad periodística la sensación es clara, cada caso como el de Giovanna es un recordatorio de que en México ejercer la labor informativa sigue siendo una profesión de alto riesgo.

En imágenes Andrés Martínez para el 28 de Guanajuato Victoria Vera.