Entre el espectáculo y la insensibilidad. La diputada de MC Sandra Pedroza replicó el lenguaje del crimen organizado
, en su lucha por reflectores, disfrazado de exhigencias por la seguridad
En una Estado como Guanajuato, donde la violencia se ha vuelto una preocupación cotidiana y la exigencia ciudadana por seguridad se torna cada día más urgente, las formas de hacer política deberían estar a la altura del momento que se vive. Sin embargo, la diputada local de Movimiento Ciudadano, Sandra Alicia Pedroza Orozco, parece optar por el espectáculo antes que la solución.
Esta semana, la legisladora realizo ante el pleno del congreso un exhorto a las autoridades correspondientes a cumplir con la presentación del plan de Seguridad Pública 2024 – 2027 y se actualice y armonice adecuadamente el Reglamento Orgánico de la Administración Pública De Guanajuato conforme a la legislación vigente.
Además Pedroza Orozco emprendió una protesta llamativa con la colocación de mantas con la leyenda “¿Y el Plan de Seguridad?” en espacios públicos como la Universidad de Guanajuato, el Palacio Municipal y la estatua de El Pípila. Una acción que, más allá del mensaje, encendió la polémica por su apología del delito como la de los narcomensajes que con frecuencia aparecen firmados por el crimen organizado.
En un país marcado por el dolor de la violencia, donde las narcomantas significan amenaza, muerte e impunidad, replicar esa forma de comunicación como herramienta política no solo es de pésimo gusto, es una banalización de la tragedia nacional. Lo que Pedroza intenta vender como una protesta simbólica, termina siendo una grave irresponsabilidad ética y una profunda insensibilidad ante el contexto social del país.
¿Realmente le interesa a la diputada la seguridad de los guanajuatenses? Porque si así fuera, podría comenzar por el camino institucional, tocar la puerta de la presidenta municipal, coordinar esfuerzos, legislar para fortalecer las capacidades locales o, en su defecto, canalizar el tema a través de su propia representación en el ayuntamiento, Liliana Preciado, la cual hasta el día de hoy, la regidora de MC en el municipio ha guardado un silencio cómplice, sin pronunciar una sola propuesta en materia de seguridad.
Y es que el discurso crítico, sin acompañamiento de soluciones, termina siendo solo eso, discurso. Mientras el Congreso estatal exige resultados, bien haría Pedroza en empezar por construir puentes, no barricadas, si en verdad su intención es coadyuvar en la paz pública y no simplemente posicionarse políticamente a costa de una narrativa dolorosa para miles de familias guanajuatenses.
Las y los ciudadanos necesitan respuestas, no performance político. La seguridad no se construye colgando lonas, ni sembrando miedo con símbolos asociados al crimen. Se construye con trabajo serio, diálogo, responsabilidad y propuestas viables. Lamentablemente, hoy no vemos eso por parte de la diputada Pedroza, sino una estrategia que confunde más de lo que aclara, y que exhibe más una ambición personal que un verdadero compromiso con la ciudadanía.
Guanajuato merece más que un espectáculo político, merece acciones que estén a la altura del momento que vivimos.
En imágenes Andrés Martínez para el 28 de Guanajuato Victoria Vera